Son las 12 del medio día cuando comenzamos la subida, el sol nos recibe con los brazos abiertos, esto junto con el peso de las mochilas, hace que nos fundamos en sudor y cansancio,
Pero nos recompensa la vista que nos encontramos al llegar al Balcón, el glaciar nos espera al día siguiente,
Descansamos y mientras nuestra vista está clavada en la ruta que nos aguarda, se ve perfectamente la huella, esto nos sobrecoge un poco, pues desde esta perspectiva es impresionante, de la sensación
de ser una vertical de 80º aunque sabemos que como punto máximo no debe de pasar de 65 a 70º en concreto en la 2ª parte de la escalada, se puede apreciar claramente una zona sin nieve, tampoco debe de haber hielo, pues la temperatura por la noche es demasiado alta para que se forme, no sabemos que tipo de roca encontraremos, (lo mas probable es que sea suelta) este punto lo mas sensato será asegurar el paso.
Bueno, todo se verá al día siguiente.
Nos disponemos a dormir cuando suenan los primeros truenos, tenemos encima una fuerte tormenta con mucha actividad eléctrica, aguantamos con resignación este mal rato, finalmente se calma y podemos mal dormir un rato.
Son las 3,30h, cuando suene la alarma del reloj, hay que ponerse en pie, sobre las 4,30 comenzamos la aproximación a la base del 1er. Corredor, +/- 60º, la nieve pese a la lluvia de la noche, no está mal, aunque algo húmeda, la 1ª dificultad la encontramos casi en la salida, ya que hay una pequeña zona sin nieve de piedras grandes muy sueltas, las paredes están chorreando agua, superado este tramo, salimos al glaciar y muy a nuestro pesar comienza a llover.
Continuamos ascendiendo por encima ya de los seracs mientras tanto vamos analizando la situación, si nos metemos en el siguiente tramo, ya no habrá marcha atrás y si se pone de tormenta el marrón puede ser muy marrón, la decisión está tomada, nos retiramos a través del glaciar y en diagonal vamos descendiendo en busca de la salida de descenso de la ruta que viene del collado de Marboré.
Vemos como todas las cordadas que habíamos intentado la norte, vienen detrás de nosotros, la decisión es unánime por todos, solo queda una pareja que todavía no ha salido del corredor.
La lluvia comienza a ser mas fuerte, de momento no suena ningún trueno, en el rapel de descenso, nos agrupamos como unas 6 personas, una de ellas hace una foto con flash a mis espaldas, el susto es monumental pensando que era un relámpago, por fortuna no pillamos tormenta.
En poco rato estamos de vuelta en las tiendas, descansamos, recogemos y nos vamos hacia abajo, no con la satisfacción que hubiera sido el haber podido hacer cima en el Perdido, pero tampoco descontentos, pues la actividad realizada es gratificante, muy alpina y especialmente bella.
el punto sin nieve, puede ser la parte mas delicada de todo el ascenso.
fotos tomadas la tarde del sábado
paradisea liliastrum
hasta pronto amigos
componontes de grupo: chemita, lolo y ale
Pero, ¡so cabrones!, os habéis ido sin mí. ¡Espero que no se vuelva a repetir!. Bromas y envidias aparte, enhorabuena, ¡qué bien os lo montáis!. Besos y abrazos.
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